La hora cero de la Rep�blica en C�mara de Diputados

CDMX CDMX. México - Lunes 3 de septiembre - 9:49 am - Juan U. Hernández

Comenzó la batalla por la República en México con una nueva mayoría en ambas cámaras del Congreso de la Unión y una mayoría de congresos locales del Constituyente Permanente, con lo que tendrán la posibilidad de legislar para contar con las herramientas jurídicas para lograr la 4ª transformación del país, como lo han anunciado desde la campaña.

¿Podrán o querrán hacerlo? Porque la primera impresión es que no han salido aún de las campañas proselitistas y asumido su papel de actores triunfadores en las elecciones por las expresiones de sumisión ante un personaje, del cual deben ser el contrapeso político, como en su momento lo fueron los liberales, de los liberales de 1857, a los que no todo le aplaudían, cuando consideraban que la propuesta iba contra los intereses de la Nación, lo debatían y lo rechazaban.

No se trata de mimetizar las acciones de las mayorías gobernantes azules, tricolores y ahora guinda, que tiene el Congreso de la Unión en este siglo, no pueden convertirse las cámaras en unas simples oficialías de parte del gobierno entrante, como también es necesario que los legisladores asuman su papel de mayoría y no olviden que las elecciones ya pasaron como se los recordó Muñoz Ledo en la sesión inaugural de la LXIV Legislatura.

Hay que cambiar la diatriba por los argumentos, ahora tienen los votos para ganar a menos que los quieran aplicar de manera mecánica como el gobierno lo ha hecho siempre, no subir ni a debatir y esperar simplemente la votación para imponer reformas y nuevas leyes.

Muchos de los epítetos y calificativos que la nueva mayoría lanzó contra la nueva oposición, para descalificarla, a muchos de ellos hoy vestidos de guinda, se los lanzaron cuando vestían otros colores, en algunos casos recuerda el dicho de aquel ladrón que para escaparse grita: “al ladrón, al ladrón” y señala a otros.

La frase de la sobrina del innombrable de aquellos mercenarios de la política que de acuerdo con las circunstancias cambian de color, no pareció inmutar siquiera a Ricardo Monreal que en 1997 en la instalación de la LVII decía algo parecido contra Porfirio Muñoz Ledo y otros que llegaron con el Frente Democrático Nacional y se adueñaron de la presidencia de la Cámara de Diputados esa vez.

El zacatecano ya ha estado en todos los partidos y lo han seguido recientemente otros que han sido operadores del gober precioso de Puebla y demás personajes ahora odiados por la concurrencia, esa es la nueva mayoría del PNR del siglo XXI, como lo calificamos en este espacio a Morena hace un año y que mi paisano lo confirmó cuando abucheaban a algunos candidatos en campaña y decía: “Este es un movimiento plural, incluyente, donde caben todos” y enumeraba de donde procedían muchos.

Tendrán que aprender a ser gobierno sin ser simples esbirros del gobernante en turno, porque en muchos queda el deseo de “gratitud” ante quien los hizo ganar la elección local para que llegaran al Congreso o al ejecutivo estatal o municipal, porque en una elección distinta, no hubieran ganado.

La gratitud debe ser con la Nación, con los mexicanos que somos sus mandantes, los que les dimos el triunfo en las urnas, el partido simplemente fue el medio para lograrlo. Los que sufrimos la inseguridad y la violencia todos los días en todos los rincones del país, la impunidad y los abusos de las autoridades.

¿Lo entenderán o serán omisos en sus responsabilidades constitucionales para mejorar y construir mejores instituciones del Estado Mexicano?

La moneda está en el aire. Yeidckol ya advirtió que aquellos que no cumplan serán echados de Morena. Veremos.